El pasado fin de semana nos fuimos de viaje.
Un viaje doble… y nos explicamos.
Hubo un «viaje físico», que nos llevó hasta Cubas de la Sagra, una casa de espiritualidad que tenemos las misioneras a caballo entre Madrid y Toledo. Y hubo un «viaje interior» que nos permitió conocernos y conocer a todas las participantes mejor. Por eso hacemos esta actividad que, en el Colegio Mayor Mara, entendemos de gran utilidad.
Un viaje, una escapada que nos sirve para comprender que la convivencia en un Colegio Mayor.
En concreto en nuestro Colegio Mayor, trasciende al mero hecho de compartir un espacio físico. Existe dicho «espacio físico»: el propio Mayor. Pero es algo más que un mero espacio para vivir: es un sitio para convivir. Y nosotras queremos que, además, sea vuestro hogar en Madrid.
Por eso pusimos rumbo a nuestra casa de espiritualidad en Cubas de la Sagra. Por un lado para descontextualizar la actividad. Sacarla del propio Colegio Mayor y sacarla de Madrid. Por otro lado sirve, junto con las actividades que desarrollamos, para convivir. Y en esa convivencia conocernos nosotras mismas y reconocernos en las colegialas con las que conviviremos los próximos años.
A esta actividad acudieron todas las colegialas, sobre todo las nuevas. Y nos acompañaron también colegialas veteranas. 65 colegialas nuevas y una treintena entre las mayores y las monitoras.
Partimos (y cumplimos) con dos objetivos perfectamente definidos:
- Conocernos
- Integrarnos en la vida del Colegio Mayor
Esta actividad nos permite afianzar el conocimiento del Mayor. Es en realidad, una profundización en la vida de un colegio mayor. En su filosofía, su historia, sus bondades y en el sinfín de aportaciones que un colegio mayor puede ofrecer a una colegiala.
Tuvimos ocasión de disfrutar con un grupo de colegialas alegres y dinámicas con, para rematar la buena experiencia, clima y ambientes favorables que nos permitieron entresacar todo el partido que nos ofrece la casa.
Contamos, como apuntábamos al principio, con la inestimable ayuda de colegialas mayores.
Ellas son quienes mejor saben transmitir la esencia del Colegio Mayor, a partir de sus propias experiencias. Ellas mismas ayudaron a que las nuevas colegialas se integraran en la vida del colegio mayor hablándolas de sus actividades, de los objetivos de un Colegio Mayor Universitario, en concreto del nuestro. Crearon una atmósfera fabulosa y un ambiente favorable para el desarrollo de la actividad- Animaron a las nuevas a participar en una convivencia agradable llena de concursos, risas, animación y felicidad.